
No se trata de aplicar estrategias complicadas o ilegales, sino de acogerte debidamente a los beneficios fiscales como los gastos de viaje deducibles, que te ayudarán a pagar los impuestos justos y no de más.
La Ley de Impuesto sobre la Renta contempla varios conceptos que puedes deducir de tu declaración anual de impuestos y, si los compruebas correctamente, el resultado es que pagarás menos anualmente.
Empecemos por conocer cuáles son los gastos empresariales deducibles:
1. Inversión en educación
Los gastos en colegiaturas se pueden deducir hasta cierto límite, no obstante puede significar una notable reducción en tu declaración de impuestos anual.
El monto deducible varía dependiendo del nivel educativo:
- Preescolar, 14,200 pesos
- Primaria, 12,900 pesos
- Secundaria, 19,900 pesos
- Profesional técnico 17,100 pesos
- Preparatoria o equivalente 24,500 pesos
Si el transporte escolar fuera obligatorio en el plantel, también puedes deducirlo de tu declaración. Lo importante es que hagas todos los pagos mediante tarjetas bancarias o cheque, no en efectivo, para que puedas deducirlos.
2. Renovación de activos
Esta es una forma inteligente de reinvertir tus utilidades, pues al tiempo que actualizas o mejoras tu equipamiento para optimizar tu desempeño también podrás deducir el costo de tu declaración de impuestos.
Puedes facturar vehículos, equipo de cómputo, u otros activos que te ayuden a que tu negocio crezca.
3. Aportaciones a tu fondo de retiro
Lo que destines a tu futuro lo puedes deducir hoy. La LISR te permite deducir hasta 10 por ciento de tu ingreso anual o cinco salarios mínimos de tu zona geográfica de los ahorros complementarios que deposites en tu cuenta de retiro personal o tu subcuenta de la Afore dedicada a aportaciones voluntarias.
4. Comprobación de gastos de viaje
Ten en claro qué gastos empresariales son deducibles y qué requisitos deben cumplir para que no tengas problemas al momento de incluirlos en tu declaración ante las autoridades hacendarias.
Recuerda que los desembolsos en alimentación, transportación, hospedaje y renta de autos se pueden deducir siempre y cuando se lleven a cabo con un propósito meramente empresarial y se hagan a más de 50 kilómetros de tu domicilio fiscal.
También es importante que respetes los límites establecidos por el SAT y que la documentación comprobatoria cumpla con todos los requisitos para deducir gastos.
En la gestión de este tipo de desembolsos y su posterior deducibilidad es muy útil contar con tarjetas de servicio como Empresarial Edenred, que te permite establecer límites de gasto a cada empleado y luego agilizar los trámites ante el fisco.
Lleva bien tu contabilidad
Para que puedas beneficiarte de las deducciones establecidas por la LISR es importante que lleves muy ordenada y de manera clara tu información contable, y que te asesores con un experto que te mantenga al tanto de las disposiciones más recientes del SAT.
Más allá de tener un contador que prepare y presente tus declaraciones fiscales, tú debes conocer los requisitos y los límites de cada tipo de gasto deducible.
Mantente informado para que puedas solicitar los comprobantes fiscales necesarios en el momento oportuno y le presentes la documentación necesaria a tu contador.